miércoles, 10 de noviembre de 2010

¿Qué es Innovación Educativa?

Cualquier innovación introduce novedades que provocan cambios; esos cambios pueden ser drásticos (se deja de hacer las cosas como se hacían antes para hacerlas de otra forma) o progresivos (se hacen de forma parecida pero introduciendo alguna novedad); en cualquier caso el cambio siempre mejora lo cambiado; es decir, la innovación sirve para mejorar algo.

La mejora puede ser reducir el esfuerzo; reducir el coste; aumentar la rapidez en obtener resultados; aumentar la calidad, satisfacer nuevas demandas, etc. Para que estas innovaciones tengan éxito el coste de introducirlas debe ser asequible para los usuarios de dichas innovaciones.

Los cambios drásticos suelen llevar asociado un alto coste y únicamente se incorporan en situaciones límite o estratégicas; sin embargo los cambios progresivos suelen llevar asociado un bajo coste y son perfectamente asumibles.

Una forma de incorporar novedades que produzcan cambios progresivos consiste en incorporar nuevas tecnologías que han demostrado éxito en otros campos; en este sentido utilizar tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en distintos productos y servicios produce cambios que consideramos innovación, ya que mejoran el producto y el servicio y lo adaptan a nuevas demandas.

Llevando todo esto al proceso educativo y descartando que en un corto espacio de tiempo se produzca un cambio drástico; la innovación educativa introduciría novedades que mejorarían el proceso formativo; pero siempre con un coste asequible; la incorporación de las TIC podría producir esa innovación educativa.Actualmente, desde el punto de vista social, el éxito de un proceso formativo para un alumno (y sus padres) es aprobar la asignatura, a más nota más éxito.

Por tanto, la innovación debe permitir obtener la misma nota que se obtenía sin innovación pero empleando menos esfuerzo; o bien dedicando el mismo esfuerzo pero obteniendo más nota.Desde el punto de vista del profesor, la nota refleja la adquisición de conocimientos, habilidades y capacidades de un alumno; por tanto la innovación para un profesor consistiría en que el alumno adquiriera conocimientos, habilidades y capacidades relacionados con la asignatura que imparte; y si además consigue que el alumno crea que es útil sería el éxito supremo.

Según parece, para conseguir todo eso hay un método que lo puede obtener denominado paradigma centrado en el aprendizaje (organización de los recursos pensando en el proceso de aprendizaje del alumno).
Bueno, pues ya tenemos la definición de innovación educativa (utilizando TIC): “novedad introducida en el proceso formativo que permite reducir el tiempo empleado por un alumno en aprobar una asignatura, a la vez que adquiere conocimientos, habilidades y capacidades a través de un paradigma basado en el aprendizaje, utilizando tecnologías de la información y las comunicaciones”. Ahora sólo queda ponerla en práctica ¿conseguiré innovar?

Metodologías Educativas

El objetivo de este post es describir cómo puede afectar la innovación educativa a los diferentes tipos de metodologías educativas.

Las metodologías educativas suelen girar alrededor de las teorías del aprendizaje (basadas en la psicopedagogía) como son el conductismo, cognitivismo, constructivismo y últimamente el conectivismo. Cada paradigma tiene sus procesos, actividades y métodos de actuación.

Que me perdonen los expertos en pedagogía, pero utilizaré un método de clasificación basado en lo que día a día hacemos en nuestras aulas, laboratorios y despachos. Hay metodologías que utilizamos a diario, otras las utilizamos excepcionalmente y otras sencillamente no las utilizamos (porque requieren mucho esfuerzo, no las conocemos o simplemente no queremos usarlas).

Metodologías educativas utilizadas habitualmente. Son las que utilizamos de forma mayoritaria en la formación (primaria, eso, bachiller, universidad,….); estas son las más conocidas y habituales:

  • Clases magistrales. La teoría de toda la vida; basta con una tiza y una pizarra, aunque también se utilizan presentaciones por ordenador, videos y la pizarra electrónica (última tecnología disponible, muy eficaz por cierto).
  • Clases prácticas. La mayoría de las veces es una clase teórica; pero en lugar de transmitir conceptos abstractos se resuelve un problema; es decir, desde el punto de vista metodológico es idéntica a las clases magistrales.
  • Clases de Laboratorio. Se suelen utilizar en materias más técnicas y los alumnos manejan dispositivos donde se comprueba la validez de las teorías. Desde el punto de vista metodológico requiere la adquisición de determinadas habilidades prácticas.
  • Tutorías. Se suelen utilizar las tutorías denominadas reactivas (el profesor responde a una demanda de información del alumno); es un instrumento muy potente, pero desgraciadamente poco y mal utilizado.
  • Evaluación. Se suele utilizar la modalidad de evaluación sumativa (la utilizada para evaluar los conocimientos adquiridos) y obtener una calificación.
  • Planificación. Se suele hacer al inicio del curso, básicamente son guías donde el alumno puede conocer con antelación los objetivos de la asignatura, el programa, el método de evaluación, la carga docente, actividades, condiciones, ….
  • Trabajos individuales y en grupo de tipo caja negra. Son trabajos que el profesor define el tema y alcance; los alumnos lo hacen por su cuenta y una vez finalizado se le presenta al profesor.

¿Cómo puede ayudar la innovación educativa a estas metodologías?, la mayoría de las personas aplican innovación educativa para sustituir estas metodologías; sin embargo, la innovación educativa se debe utilizar PARA MEJORARLAS NO PARA SUSTITUIRLAS, por ejemplo, si el objetivo de la clase magistral es transmitir unos conceptos para que los alumnos los asimilen, la innovación educativa debe ayudar a transmitir esos conceptos y a que los alumnos los adquieran con menos esfuerzo.

En este caso la innovación educativa produce un cambio, no metodológico pero sí de eficacia.

Metodologías educativas no utilizadas pero ampliamente conocidas por el profesorado. Son metodologías que cualquier docente conoce, pero que normalmente no se aplican porque el esfuerzo que requieren es muy alto. Suelen estar relacionadas con los paradigmas basados en el aprendizaje.

  • Evaluación diagnóstica. Es la evaluación que se realiza para conocer las condiciones de las que parte cada alumno; es muy eficaz, ya que permite conocer lo que el alumno sabe, lo que no sabe y lo que cree saber.
  • Evaluación formativa. Se emplea para ayudar al alumno con su proceso de formación; se trata de comprobar el aprendizaje para, en caso de que no vaya como debiera, tomar acciones correctoras.
  • Planificación personalizada. Es una asignación de recursos en el tiempo para que el alumno alcance los objetivos formativos; se suele planificar en función del estilo de aprendizaje de cada alumno.
  • Trabajos individuales y grupales tipo caja blanca. Son trabajos en los que el profesor participa como miembro del equipo de trabajo; básicamente hace unas veces de director (las menos) y otras de asesor del grupo.

¿Cómo puede ayudar la innovación educativa en este tipo de metodologías? Este tipo de metodologías son conocidas por todos, están muy relacionadas con el paradigma centrado en el alumno; pero tienen un gran problema: “el esfuerzo para realizarlas”, se imaginan que tengo que hacer una evaluación diagnóstica a cada alumno, una planificación personalizada, una evaluación formativa, re-planificar y participar en cada trabajo en grupos. Imposible dirán.

Muchas personas piensan que la innovación educativa se basa, precisamente en introducir estas metodologías en la formación; sin embargo, EL OBJETIVO DE LA INNOVACIÓN EDUCATIVA ES REDUCIR EL ESFUERZO ASOCIADO A ESTAS METODOLOGÍAS, dicho de otra forma poder utilizarlas sin aumentar el esfuerzo actual.

Metodologías educativas no utilizadas por desconocimiento de las mismas. Se suele creer que en este grupo de metodologías se engloban las correspondientes a los últimos avances, esto es así, pero también hay otras “muy antiguas” pero nada conocidas.

  • Tutoría proactiva. Se basa en anticiparse a la demanda de información por parte del alumno; es una metodología altamente eficaz, ya que el objetivo es resolver la duda en el momento en que se produce (realmente antes de que se produzca).
  • Trabajo cooperativo. Se basa en aprovechar los recursos creados por los propios alumnos y profesores. Se confunde bastante con el trabajo en grupo pero no tiene nada que ver; básicamente actúa como una cooperativa donde todos sus miembros son constructores y beneficiarios de la cooperación.
  • Ciclo de Kolb. Esta metodología se basa en la acción como efecto transformador del conocimiento; entre acción y acción se relaciona el resultado con los conocimientos abstractos. Es una metodología muy eficaz para asignaturas en las que se quiera enfocar hacia la adquisición de habilidades y capacidades.

Estas metodologías se suelen asociar a paradigmas basados en el aprendizaje, pero también al enfoque basado en la práctica. ¿Cómo puede ayudar la innovación educativa a estas metodologías? Básicamente a plantear las asignaturas de una forma completamente distinta.

Las innovaciones más fáciles de conseguir son las que afectan a las metodologías que más se utilizan y pienso que es un buen comienzo, ya que no requieren que se cambie el planteamiento de las asignaturas; sobre este tipo de innovaciones es fácil realizar “políticas educativas”.

Las innovaciones sobre las metodologías poco utilizadas pero conocidas, requieren unas herramientas tecnológicas concretas; por tanto hay que formar al profesorado en habilidades.

Finalmente las innovaciones sobre las metodologías no conocidas, requieren una capacitación distinta y lamentablemente en algunas asignaturas no se pueden llevar a cabo.

OBSERVACIÓN.
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ESTE ES EL POST MÁS VISTO DE LA SECCIÓN METODOLOGÍAS EDUCATIVAS.

LOS OTROS 4 MÁS VISTOS SON:

2. Un ejemplo para diferenciar docencia y aprendizaje.

En este post se trata de diferenciar entre paradigmas docentes y de aprendizaje; pero con un ejemplo. El ejemplo elegido es una clase grabada en video; muchas personas piensan que este método se basa en paradigma de aprendizaje; sin embargo, en el post se demuestra que no. A continuación se pone un ejemplo sobre el mismo caso; pero bajo un enfoque de un paradigma de aprendizaje.

3. Metodologías Educativas. Indicadores para saber qué tipo de metodología utilizo.

Se trata de dar “pistas” para saber si una metodología está basada en paradigmas de aprendizaje o docentes.

4. Reducir las clases teóricas un diagnóstico unánime, pero … ¿cómo reducirlas?.

En este post se aportan datos donde se dice que en España hay excesivo número de clases teóricas; sin embargo, el planteamiento de este post no es sustituirlas, ni reducirlas considerablemente; se basa en no renunciar a los objetivos de las clases magistrales (normalmente de adquisición de conocimientos), la idea principal es cambiar de paradigmas para que los alumnos consigan el mismo objetivo.

5. Exámenes finales; donde la innovación educativa se la juega.

Los exámenes son la prueba del algodón de cualquier innovación educativa; si se supone que renovamos los métodos por paradigmas de aprendizaje, parece lógico que cambiemos la metodología para los exámenes; mucho profesorado confunde cambiar la metodología de evaluación con poner más exámenes.

Blog Innovación Educativa

El Mito del Buen Salvaje

Un adolescente de 14 años de un colegio público de Lima, continuamente hostilizado por su origen andino, fue seguido a la hora de salida por tres de sus compañeros. Lo acorralaron, lo golpearon sin piedad y le lastimaron la columna vertebral. Ahora está parapléjico. Un niño de 10 años fue flagelado brutalmente por el dueño de un auto que el chico rayó con un clavo. La paliza estuvo a punto de provocarle un desprendimiento de retina. Estas dos noticias aparecieron reiteradamente en los diarios y noticieros limeños en los últimos días.
En ambos casos, la violencia incontenible y abusiva de los agresores ha provocado una justa indignación en diversos sectores de la ciudadanía. No obstante, lo que más desconcierto ha causado han sido dos cosas: el descomunal cinismo de los agresores, empeñados en negar o disimular lo evidente, y la insólita defensa de sus encubridores, la directora del colegio en el primer caso, los familiares en el segundo, que no han dudado en considerarlos más bien víctimas de sus agraviados.
A historiadores como deMause le debemos el conocimiento de hechos muy similares en la oscura edad media: padres que propinaban una feroz paliza a sus hijos para escarmentarlos por alguna travesura y que luego se echaban a llorar, argumentando que golpearlos le dolía más a ellos. Así, sus apaleados hijos devenían culpables del sufrimiento que causaban a sus padres por «obligarlos» a hacer eso. Y eran los niños aporreados quienes debían disculparse por desconsiderados.
Esta absurda inversión de roles, donde el verdugo acaba como víctima, sigue observándose hoy: un ciudadano que pide ayuda a un patrullero en la puerta de un banco, termina muerto por estrangulamiento en la comisaría. Uno de los policías implicados en el crimen se defiende diciendo: «es que el señor estaba alterado». El sujeto que echó agua hirviendo en el rostro de su mujer mientras dormía, se justifica diciendo: «es que ella me engañaba». Una adolescente denuncia al conviviente de su madre por abusar sexualmente de ella a lo largo de dos años. El abusador replica: «es que ella me buscaba». Un alto y robusto dignatario de la nación, rodeado de 50 guardaespaldas fuertemente armados, golpea a un escuálido e indefenso jovencito, amparándose en la misma tesis: «es que él me insultó».
En todos estos casos hay tres elementos comunes: primero, un evidente desbalance de fuerza entre las partes en conflicto, un lado es notoriamente más poderoso que el otro. Segundo, un uso violento y abusivo de esa fuerza en beneficio propio. Tercero, una justificación absoluta de la violencia en nombre de un bien mayor. En otras palabras, si me molestas te aplasto, te aplasto cuando quiero y porque puedo y siempre será tu culpa. Luego, los golpeados de esta historia son los equivocados, los únicos responsables de su suerte y, por lo tanto, ¡duro con ellos!
Hannah Arendt, una notable filósofa alemana, sostenía que el poder no es sinónimo de violencia. Para Arendt el poder «brota donde quiera que la gente se una y actúe de mutuo acuerdo», nace del concierto de diversas voluntades. La violencia, en cambio, surge cuando el poder que sustenta a las personas se debilita. Entonces pueden recurrir a la fuerza para imponer su voluntad. Ese es el trasfondo en todos estos casos. Gente que pierde el poder que le daba el consenso, pero conserva la fuerza y la usa para lograr lo que quiere. Para vergüenza nacional, tienen barra y hay en ella hasta directores de escuela, dispuestos a encubrir o justificar el abuso y la violencia contra el más débil en nombre del propio interés.
Por: Luis Guerrero Ortiz


¿Cómo hacer Proyectos Exitosos?

La vida profesional de los tiempos que corren está marcada por la realización de proyectos, emprendimientos e innovación. Un proyecto es la sistematización de un plan de trabajo para alcanzar un objetivo, el emprendimiento es la capacidad de las personas que lo impulsan para alcanzar ese objetivo; la innovación es la percepción que tienen los impulsores de la relación que tiene su propuesta con el valor que la gente le da. Estamos en forma constante formulando proyectos en un entorno en el que las necesidades cambian dinámicamente, y eso nos exige algunas nuevas capacidades para afrontarlos.

Eduard Punset, divulgador científico y economista, en su interesante libro Adaptarse a la Marea nos deja algunas interesantes ideas basadas en el biomimetismo; esto es, en observar cómo funciona la naturaleza e imitar de ella aquellos procesos que realiza en forma armoniosa y bella para aplicarlos a la vida humana. Esto significa ver la naturaliza como una gran maestra y aprender de ella para hacer una vida sana y sostenible. La biomímesis presenta una era basada no en lo que podemos extraer de los organismos y sus ecosistemas, sino en lo que podemos aprender de ellos. Este enfoque difiere enormemente de la bio-utilización, que supone cosechar un producto o productos como, por ejemplo, cortar madera para hacer pavimentos o recolectar plantas medicinales.

La biomisesis se aplica a un sinfín de campos, desde la producción de nuevos materiales, como por ejemplo el velcro, o los estudios que actualmente se hacen para conseguir replicar la tela de araña, cuya resistencia es cinco veces superior a la del acero, pero flexible. Aplicaciones en la medicina estudiando del comportamiento de los insectos de modo que nos digan qué plantas pueden ser buenas apuestas para nuevas medicinas. Otras aplicaciones sobre economía, eficiencia, cooperación y reciclaje al mercado: en Chattanooga, Brownsville, Baltimore y Cape Charles, por ejemplo, se están construyendo polígonos industriales que funcionan en un ciclo cerrado, que emulan los patrones de ecosistemas maduros como los bosques de secuoyas. Se está estudiando el mejillón azul, que se agarra a las rocas gracias a una sustancia adhesiva que puede hacer lo que las nuestras no pueden: secarse y pegar bajo el agua. Hay diferentes equipos tratando de mimetizar este pegamento subacuático. Otros estudiosos están mimetizando las estrategias de selección natural como herramientas para optimizar software llamados “algoritmos genéticos”. Las aplicaciones son muchas, tantas como el amplio crisol de la actividad humana.

Sin embargo, aquí me interesa un campo en particular: las organizaciones. Y, con ello, lo que hacen las personas dentro de ellas. Las estrategias llamadas extractivas, que expolian el medio, forman parte de una visión de mundo que poco a poco vamos abandonando. Las nuevas estrategias, los nuevos proyectos deben llevar en su ADN la sustentabilidad, el movimiento armónico con su entorno humano, social y ecológico. La naturaleza nos ofrece grandes lecciones para incorporar en nuestro hacer una nueva mirada de cómo operamos y cómo alcanzar beneficios de largo plazo. Los insectos sociales son un ejemplo de organización inteligente. En esencia, creemos que los insectos sociales han sido muy exitosos – han sobrevivido a casi todos cambios del planeta y viven en diversos ecosistemas - por tres características fundamentales :

Flexibilidad (la colonia puede adaptarse a un entorno cambiante);

Robustez (incluso cuando uno o más individuos fallan, el grupo todavía puede desempeñar sus funciones), y

Auto-organización (las actividades no son supervisadas ni a nivel central ni a nivel local, es un sistema distribuido).

Los dos primeros atributos son muy reconocidos por los ejecutivos de negocios, se relacionan fácilmente con ellos, pero a menudo son muy reacios a la tercera, que es quizás el más intrigante. A través de auto-organización, el comportamiento del grupo emerge de la interacción colectiva de todas las personas. De hecho, un tema crucial y recurrente en un enjambre inteligente es que incluso si los individuos siguen reglas simples, el comportamiento grupal resultante puede ser sorprendentemente complejo y muy eficaz. Y, en gran medida, la solidez y la flexibilidad son una propiedad emergente de la auto-organización. Conocer cómo funcionan los procesos organizativos de los insectos sociales podría arrojarnos luces para emprender proyectos y estrategias de negocio exitosas y sustentables.

Punset, muy lúcidamente, siguiendo algunos ejemplos de la naturaleza nos propone una fórmula para conseguir emprender proyectos exitosos. Una adaptación de la original es la que les planteo aquí.


La fórmula de proyectos exitosos (E) tiene los siguientes componentes:

TP = Tiempo Psicológico se refiere al rol de las emociones en lo que hacemos. A diferencia del tiempo físico que es cartesiano. La emoción es absolutamente indispensable para lanzar un proyecto, poniéndose asimismo en el lugar de los demás. La emoción es el multiplicando de todos los otros factores juntos. Si no hay emoción en un proyecto mas que reducirse las posibilidades, no hay ninguna de conseguir éxito.

I = Interactividad es un atributo de los homínidos heredados de los primates, que son animales muy sociales. Hoy más que nunca en la historia de la humanidad se plantea como exigencia de cualquier actividad humana la creación de redes. Ningún proyecto puede conseguir sus objetivos si éste es una cruzada de un “llanero solitario”. La información sólo fluye a través de redes de personas que la utilizan para darle valor agregado. La comprensión de la complejidad exige un abordaje colectivo.

A = Aceleración es la innovación para el mundo de los negocios y las organizaciones. Buscar la diferenciación es una estrategia clave para los proyectos exitosos. Sin ella difícilmente se logrará consolidar un proyecto. Para ello se requiere moverse en los vértices de las fronteras, desafiar los supuestos y lo establecido y, por ende, asumir riesgos. El mundo incierto en el que vivimos demanda a la organizaciones (y las personas) constante innovación. Reinventarse para adaptarse a los cambios constantes del entorno. La naturaleza es maestra en dinámica de adaptación. Mutar más, y no menos, en entornos turbulentos, como lo hacen las bacterias, maestras de la innovación en la naturaleza.

TI = Tecnologías de la Información. La evolución humana ha sido una trayectoria en busca del conocimiento. Para ello los seres humanos hemos desarrollados tecnología: desde el lenguaje oral, escrito, la imprenta hasta las tecnologías de la información y la comunicación. Un proyecto exitoso debe utilizar en forma intensiva las TI disponibles. Estas permiten hoy garantizar la interactividad sin acceder estar físicamente en el mismo lugar y así como el acceso y difusión de información.

C = Conocimiento. Disponer de conocimiento no es lo mismo que erudición. Lo importante, como diría Edgar Morin, es tener una mente bien organizada más que llena. Se trata de hacer buenas preguntas, más que de andar buscando las mismas respuestas y aprender de las experiencias. Saber sacar lecciones aprendidas, especialmente de los errores. Para crear un ecosistema de negocios he de especializarme y muy especialmente conocer muy bien ese entorno e interactuar con él intensamente. Ello demanda manejar información de clientes, proveedores, aliados, competidores y de nuestros propios colaboradores. Los insectos sociales son maestros de organización utilizando el conocimiento experiencial.

M = Masa. El denominador M se refiere a perder masa. La masa equivale a la historia, a las creencias, a los modelos mentales que tenemos, a las formas como solucionamos las cosas, incluso a los valores. Apegarse a ellos en tiempos de turbulencia y cambio es una rémora, nos deja desencajados e incluso pasmados ante la acelerada dinámica de cambios del entorno. A mayor masa menores posibilidades de conseguir éxitos. Por tanto, se requiere de desarrollar la capacidad de desprenderse de los surcos de la mente para tejer nuevos que igualmente caerán en la obsolescencia en un futuro próximo o no tan próximo. Aprender a aprender y a desaprender es una cualidad de los emprendedores innovadores de estos tiempos. Perder masa (tal como la definimos aquí) nos permite ganar flexibilidad y adaptabilidad.

La biología y la naturaleza, creo yo (y otros/as) se están convirtiendo en el fuente de conocimiento para hacer de lo humano y de las cosas que hacemos algo más sustentable y beneficioso para todos. Mirar la naturaleza y sus procesos organizativos es una fuente de conocimiento para que nuestras organizaciones se hagan más ecológicas y exitosas. Esta es la invitación que les hago.

Por: Marcelo Lasagna

¿Se Puede Permitir un Profesor Tecnológicamente Ignorante?

Como continuación del mensaje ‘Web 2.0 y Educación’ (en particular para profesores), respecto a la llamada Educación 2.0, deciamos…

“… es una situación que merece nuestra atención como profesores, y también la de las instituciones y sus responsables. Quizás no somos todavía lo suficientemente conscientes, de los potenciales problemas (no ya de tipo técnico sino personales) a los que nos podemos llegar a enfrentar los profesores de una cierta edad. Me refiero a problemas de ‘exclusión’, ‘autoestima’, ‘aislamiento’, etc. ante los nuevos ‘media’, las nuevas formas de enseñar, aprender, interaccionar, comunicar, colaborar, cocrear, conversar,compartir, … que se nos vienen encima como un ‘tsunami’, tanto desde fuera (Bolonia, nuevos paradigmas, proceso de enseñanza/aprendizaje basado en competencias) como desde dentro (los nuevos alumnos, cada vez mas alumnos 2.0, mas nativos digitales).

Corremos el peligro de que se produzca una relativa ‘brecha digital’ dentro de nuestras instituciones de enseñanza.

deberiamos empezar cuanto antes a reflexionar, y a tomar medidas, en nuestras instituciones académicas.”

y enlazando con la necesidad manifestada de reflexionar acerca del tema, me gustaría compartir el siguiente comentario.

El mundo de la Educación, y en particular la Universidad con los requerimientos de adecuación al Espacio Europeo de Enseñanza Superior (EEES), está viviendo con relativa tensión la necesidad de implementar en el aula, nuevos paradigmas y metodologías. Dicha implementación pasa por el uso de tecnología educacional por parte del profesorado, en particular aplicaciones web 2.0, en un entorno tecnológico altamente dinámico. A su vez, dicha tecnología cambia radicalmente el papel del profesor, y los alumnos de hoy, que poseen en general competencias tecnológicas, serán los futuros ciudadanos y profesionales de una Sociedad RED, y como tales y para tal entorno deben ser formados.

Esta misma tensión y preocupación, a un nivel mas global, ha producido diversas reflexiones y comentarios. En particular, deseo mencionar el mensaje de blog… Is It Okay To Be A Technologically Illiterate Teacher?, premiado con el ‘most influential post‘ en la última edición de los ‘Winner Edublog awards 2007‘.

En su comentario, Karl Fisch, destaca la existencia de un sentimiento generalizado, por parte de algunos profesores, de que no solo es admisible decir ‘No se nada de ordenadores’, sino que incluso se muestran orgullosos de su ignorancia o incultura tecnológica. No se trata de que la tecnología sea la finalidad de la docencia, es simplemente una herramienta que nos ayuda a aprender y enseñar, asi como a crecer personalmente, es una herramienta indispensable. En la actualidad, la tecnología es el soporte de casi toda nuestra actividad, y en particular a la hora de ‘comunicarnos’ con los demás, y… ‘¿no es la comunicación una de las ideas esenciales a todas las disciplinas?’.

El hecho de que una parte del profesorado no solo esté confortable en su ignorancia, sino que aparentemente no desee esforzarse en aprender nuevas cosas, es algo preocupante tanto a nivel instruccional, como personal y social. Concluye con la siguiente cita…

“If a teacher today is not technologically literate – and is unwilling to make the effort to learn more – it’s equivalent to a teacher 30 years ago who didn’t know how to read and write”

Por su parte, Terry Freedman (‘best group blog’), en “Oh, Sir, You are too kind”, realza como una de las barreras para implementar el uso de la tecnología educacional en el aula, la disposición a ser indulgentes con dicha ignorancia tecnológica, en detrimento de los alumnos, al trasmitirles un ‘curriculum oculto’, asociado a nuestro comportamiento, consistente en mensajes tales como:

‘la tecnología es relativamente poco importante’, ‘no importa que los demás conozcan mi ignorancia tecnológica’, ‘desde el punto de vista del que emplea, es aceptable ser un ignorante tecnológico’, ’si te muestras suficientemente incapacitado, sin recursos, alguien al final te ayudará’,... que le llevan a concluir diciendo:

“We should stop being so nice. After all, we’ve got our qualifications and jobs, and we don’t have the moral right to sit placidly on the sidelines whilst some educators are potentially jeopardising the chances of our youngsters”

Personalmente creo que el posicionamiento por parte de los responsables académicos, y de los propios profesores, debe ser ante todo desde una perspectiva positiva y proactiva, no intimidatoria, ni agresiva. Quizás contemplando diferentes tipos de acciones desde la comprensión y análisis de cada situación, hasta la sensibilización y formación, asi como identificar ‘recompensas’ diversas que estimulen la disposición a adecuarse ante los nuevos retos.

Nuevos retos que trascienden los requerimientos instruccionales (EEES) y los derechos de los alumnos a ser formados para la Sociedad del siglo XXI, para convertirse, además, en retos personales (autoestima) y sociales (brecha digital generacional), convergiendo todos ellos en el desarrollo de una Sociedad RED inclusiva y socialmente sostenible.

El medio es el mensaje…

“In order to teach it, we have to do it. How can we teach this to kids, how can we model it, if we aren’t literate ourselves? You need to experience this, you need to explore right along with your students. You need to experience the tools they’ll be using in the 21st century, developing your own networks in parallel with your students. You need to demonstrate continual learning, lifelong learning – for your students, or you will continue to teach your students how to be successful in an age that no longer exists (Karl Fisch)

¿Cuál es tu opinión?.

Blog de Enrique Rubio

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Vista de Jaén - Perú